¿“EL CIGARRERO DE HUACHO”?

DESDE HUACHO-PERÚ
Siempre hemos conocido que Huacho es una ciudad hospitalaria. Qué es el portal del norte de nuestro país: “Tierra madre, indio fuerte, /mujer hermosa, campiña fértil, portal norteño, /amor y paz.”. Pero el que la queramos no obvia que tengamos algunas preocupaciones por el atraso y abandono en que se encuentra por parte de nuestras autoridades locales y gobernantes. Nadie quiere responsabilizarse del estado en que se encuentra.
Lo que me ha movido a escribir sobre este tema es por que en estos días se han tocado en algunos medios de comunicación o personas de nuestra localidad tres problemas que nos ha vuelto a la realidad de la ciudad en la qué vivimos. Sobre la inmunidad con la que cuenta QUIMPAC-EMSAL para el pago de sus tributos y el canon para la región pero que ya se ha tratado con bastante locuacidad, sobre todo por los políticos en campaña electoral, ojalá que no sea por la coyuntura y después pase el tema al olvido. El segundo tema tiene que ver con el Malecón Roca. Este tema también ha sido tratado hasta con fotos por la Revista” FAMA” de la amiga Angélica Sotelo. Se habla y se dice que es un problema que debe resolver Plaza Vea, puede ser cierto, pero la realidad es que está abandonada.
Pero hay un tema que ha despertado mi curiosidad. Todos los días lo observamos y comentamos sobre el. Seguro que en unos inicios con mucho malestar pero la inclemencia de nuestras autoridades ha hecho que ya sea parte del paisaje urbano de nuestra ciudad y nos hallamos vuelto indolentes: LOS HUECOS. El Profesor Alexis Rodríguez, en uno de estos días se ha presentado en un noticiero de la TV de la noche del amigo Oscar Nazario, “A TIEMPO”, y con fotos nos ha enrostrado algo que ya se había vuelto parte del panorama al transitar por las calles de Huacho.
Y es cierto, huecos encontramos a diestra y siniestra, no hay calle de Huacho que se salve de ellos. Y los hay para todos los gustos, si los originó EMAPA, Telefónica, o el vecino arregló los servicios de alcantarillado en forma clandestina, no interesa, lo cierto es que existen, unos más grandes que otros, y su existencia nos trae al recuerdo el malestar que originan y se la deben traer a los insufribles colectiveros y taxistas como el poema de Vallejo cuando dice que “Abren zanjas obscuras en el rostro (tico) más fiero y en el lomo (moto taxi) más fuerte”. Pero no solo a ellos, sino también a nosotros, como pasajeros o choferes, por nuestros riñones. Cuánto años quisimos salir del empedrado para llegar al asfaltado pero no con huecos. Ahora, Huacho se está pareciendo a la luna, por las erosiones.
No faltarán las justificaciones de las autoridades o los causantes de dichos huecos pero el hecho es que existen. Lo malo es que ahora no sólo son los huecos sino el abandono de las pistas de muchas de las calles de nuestra ciudad como las de la urbanización Huacho y San Pedro. Sus pistas son una calamidad.
Pero eso no es todo, a los huecos hay que añadirle el que se inicien obras de agua y alcantarillado con mucha pompa, lo que no sabemos es cuándo han de terminarse. Seremos insufribles a estas calamidades o no será por casualidad lo que escribió Don Ricardo Palma en: “El cigarrero de Huacho”.