martes, 2 de marzo de 2010

¿CHUI, LÍDER “RESILIENCIE” DEL SIGLO XXI?


DESDE HUACHO-PERÚ
En estos días Don Néstor Roque Solís presentó su libro “Liderazgo en la tormenta global”, uno más de los varios que ya tiene publicado. Néstor es un escritor y periodista que tiene el valor agregado de ser un estudioso de la realidad socio económica de nuestra región y que no debemos dejar de leer.
Él es uno de los más prolíficos escritores que tiene nuestra región y conocedor no sólo de nuestra realidad si no la de otras latitudes con problemas socio económicos casi similares a los nuestros. Estuvo afincado muchos años en Chile, en los años que buscaba el país hermano horizontes que le permitieran salir del estado de pobreza como se encuentran muchos países de América Latina. Siempre que hay oportunidad de conversar con él nos hace referencia de su experiencia en Chile. Quizás no compartamos completamente el camino elegido por ese hermano país pero sí es ejemplo al haber logrado un desarrollo muy superior al nuestro.
Su último libro dedicado a los líderes (no sólo políticos sino también empresariales) es un libro que toca temas que son necesarios reflexionar si queremos y amamos nuestra región. Comienza haciendo un resumen del desarrollo del liderazgo desde los años 400 a de c, desde los tiempos del filósofo griego Platón, hasta el siglo XXI, y concluye con que “Los líderes hacen lo que otros no se atreven a hacer”.
Luego arremete con los desafíos de una economía del futuro y su preocupación de si estaremos preparados para enfrentarla y dice “La tarea impostergable de los gobiernos latinoamericanos, es y será en el futuro discutir sobre las implicancias de la globalización y la nueva economía”.
En el Capítulo III nos vislumbra cómo debe ser el hombre del siglo XXI, líderes que “muevan las conciencias y los corazones de la gente.” y comenta sobre las economías de libre mercado y que ponen al lucro como una prioridad lo que trae corrupción que a su vez impide “el desarrollo equilibrado y de respeto mutuo entre empresas y naciones,…”.
En el Capítulo IV vuelve a la arremetida de ese gran flagelo que es la corrupción y no habla de “EL LOBBY, ANTESALA DE LA CORRUPCIÓN”. Dice que el lobby “es hacer negociación en la antesala, preparar el terreno, influenciar y recomendar, hacer la cosa o el tratado de forma particular o mejor dicho a gusto del que tiene el poder político…”.
Adentrados en la lectura muchos nos preguntaremos y ¿qué es resiliencia?, vocablo poco común para muchos. Este vocablo que tiene su origen en el idioma latín, en el término resilio, significa volver atrás, volver de un salto, resaltar, revotar. En buen romance en las ciencias sociales sirve para caracterizar a aquellas personas que, a pesar de nacer y vivir en situaciones de alto riesgo, se desarrollan psicológicamente sanos y exitosos (Rutter, 1993) y es tomado por Néstor para tratar en el Capítulo V el tema de las fuerzas internas que deben tener los líderes para crear sistemas, proceso y leyes. Acá resalta la clase de líderes que necesitamos para lograr el desarrollo con rostro humano.
Cuando relaciona al nuevo líder con el empresariado, nos dice de él, “que no hay otro remedio que el mismo interesado viva profundamente los valores, los principios éticos inherentes a su profesión;…” y trata de resumir este capítulo con una frase de André Brousseau “No sólo de puras ganancias vive el empresario sino de toda sabiduría que le viene de lo alto.” Bellas palabras para los oídos sordos de algunos de nuestros empresarios.
En el libro hay otros temas interesantes, pero uno que llama la atención muy de sobremanera es el de las “ENSEÑANZAS DE LA FAUNA AL MUNDO EMPRESARIAL” que trata de LA VIDA AVESTRUZ, TRANCOS LARGOS COMO EL CANGURO, EL TRABAJO EN EQUIPO DE LAS HORMIGAS, APRENDAMOS DE LOS DELFINES, TENACIDAD EN EL TRABAJO (reivindicación del burro) y otros animales que por su agilidad, visión o su vuelo son dignos de imitar por el hombre o en este caso los líderes del siglo XXI.
Los últimos capítulos son dedicados a la regionalización y descentralización (o agonía), y propuestas de gobernabilidad regional y municipal. Y ya para casi concluir la lectura en una de sus páginas dice: “ningún país desaparece, más bien puede transformarse y devenir en otra cosa mejor. Nosotros no renunciamos a un futuro promisorio. No podemos resignarnos a un presente pobre, caótico, inmoral y desesperanzado”. Coincidimos con tales afirmaciones porque la igualdad, la justicia y el desarrollo humano es el SUEÑO de todos los huachanos y de la región,... y la esperanza es lo último que se pierde.