DESDE HUACHO-PERÚ
En estos días el ex alcalde del distrito de Chancay y dirigente del Movimiento Regional “FUERZA PERÚ”, Dr. Luis Casas Sebastián, a su paso por Huacho ha manifestado que ellos se encuentran políticamente hablando ubicados como centro izquierda por lo que se le están adhiriendo gente ligada al humalismo, Confianza Perú y el Modep.
Pero hagamos una breve remembranza del quehacer político y entender de qué se trata. Podríamos decir que todo se remonta a 1917 cuando Vladímir Ilich Uliánov, conocido como Lenin implantó el sistema socialista en Rusia, en 1949 Mao Zedong, lo hizo en China y en América en 1959, en Cuba, hizo lo mismo Fidel Castro. Desde aquellos años el mundo se divide en dos sistemas predominantes, capitalista (preferencia del capital sin intervención del estado), liderado por EE.UU., Inglaterra, etc. y socialista (predominio de la administración colectiva y estatal) por la República Popular China y Cuba.
En el Perú la izquierda alcanzó su auge cuando salió elegido Alcalde de Lima Alfonso Barrantes en 1984. En 1990 parte de ese electorado apoyó a Alberto Fujimori quien llegó a la presidencia con propuestas muchas de ellas de izquierda sin embargo ya en el gobierno aplicó políticas de libre mercado que recusaba. Después de aquella época la izquierda fue casi borrada del escenario político por su divisionismo pero también por la arremetida de Sendero que dio pie a que cualquier asomo de protesta (en el que se mueve bien la izquierda) sea sindicada como terrorismo.
Ahora con la caída del socialismo en Rusia en 1991 y la debacle del sistema capitalista de estos meses se ha abierto un nuevo panorama que vislumbra un nuevo posicionamiento político mundial. En América reviven nuevos vientos con el afianzamiento de una izquierda remozada.
En este nuevo amanecer, los partidos políticos en el Perú ya no quieren ser de derecha (economía caída en desgracia por el momento), que significa estar de acuerdo con una economía de libre mercado a ultranza, ahora se colocan al centro. Si no analicemos las pretensiones de Lourdes Flores Nano. Pero algo parecido pasa con los partidos o movimientos de izquierda (no todos) que ya no quieren que se les vincule con el socialismo, y se dicen que están con las masas pero en economía nos hablan de un estado promotor. Tanto la derecha como la izquierda quieren colocarse al centro porque las preferencias del electorado se inclinan por esa propuesta.
La derecha para no decir que es de derecha se quiere colgar el letrero de centro que vendría a ser centro derecha o propugnadores de una economía de libre mercado inspirada en el socialcristianismo que también se le conoce como democracia cristiana. En el caso de la izquierda para no llamarse socialista quiere colocarse en la centro izquierda, algo así como ser socialdemócratas o izquierda reformista.
Eso de centro suena un poco ambiguo y necesita un mayor debate. Pero lo interesante en todo caso no es sólo el membrete porque las encuestadoras le dan un amplio margen de apoyo del electorado sino que digan los líderes con cuál de las opciones políticas concuerdan y lo más interesante, que sean consecuentes, y no como Fujimori que en las elecciones decía una cosa e hizo otra, o como el caso de Alán García, que también ocurrió lo mismo.
El Dr. Casas se dice de centro izquierda, y dice que Nelson Chui es de derecha, tan igual que Miguel Ángel Mufarech, y dice, a renglón seguido que Pedro Zurita es de centro izquierda. Habrá que saber al final cual es la definición de cada uno de ellos y sin ambigüedades, porque tener una opción política no es una ofensa o… ¿sí?
Pero hagamos una breve remembranza del quehacer político y entender de qué se trata. Podríamos decir que todo se remonta a 1917 cuando Vladímir Ilich Uliánov, conocido como Lenin implantó el sistema socialista en Rusia, en 1949 Mao Zedong, lo hizo en China y en América en 1959, en Cuba, hizo lo mismo Fidel Castro. Desde aquellos años el mundo se divide en dos sistemas predominantes, capitalista (preferencia del capital sin intervención del estado), liderado por EE.UU., Inglaterra, etc. y socialista (predominio de la administración colectiva y estatal) por la República Popular China y Cuba.
En el Perú la izquierda alcanzó su auge cuando salió elegido Alcalde de Lima Alfonso Barrantes en 1984. En 1990 parte de ese electorado apoyó a Alberto Fujimori quien llegó a la presidencia con propuestas muchas de ellas de izquierda sin embargo ya en el gobierno aplicó políticas de libre mercado que recusaba. Después de aquella época la izquierda fue casi borrada del escenario político por su divisionismo pero también por la arremetida de Sendero que dio pie a que cualquier asomo de protesta (en el que se mueve bien la izquierda) sea sindicada como terrorismo.
Ahora con la caída del socialismo en Rusia en 1991 y la debacle del sistema capitalista de estos meses se ha abierto un nuevo panorama que vislumbra un nuevo posicionamiento político mundial. En América reviven nuevos vientos con el afianzamiento de una izquierda remozada.
En este nuevo amanecer, los partidos políticos en el Perú ya no quieren ser de derecha (economía caída en desgracia por el momento), que significa estar de acuerdo con una economía de libre mercado a ultranza, ahora se colocan al centro. Si no analicemos las pretensiones de Lourdes Flores Nano. Pero algo parecido pasa con los partidos o movimientos de izquierda (no todos) que ya no quieren que se les vincule con el socialismo, y se dicen que están con las masas pero en economía nos hablan de un estado promotor. Tanto la derecha como la izquierda quieren colocarse al centro porque las preferencias del electorado se inclinan por esa propuesta.
La derecha para no decir que es de derecha se quiere colgar el letrero de centro que vendría a ser centro derecha o propugnadores de una economía de libre mercado inspirada en el socialcristianismo que también se le conoce como democracia cristiana. En el caso de la izquierda para no llamarse socialista quiere colocarse en la centro izquierda, algo así como ser socialdemócratas o izquierda reformista.
Eso de centro suena un poco ambiguo y necesita un mayor debate. Pero lo interesante en todo caso no es sólo el membrete porque las encuestadoras le dan un amplio margen de apoyo del electorado sino que digan los líderes con cuál de las opciones políticas concuerdan y lo más interesante, que sean consecuentes, y no como Fujimori que en las elecciones decía una cosa e hizo otra, o como el caso de Alán García, que también ocurrió lo mismo.
El Dr. Casas se dice de centro izquierda, y dice que Nelson Chui es de derecha, tan igual que Miguel Ángel Mufarech, y dice, a renglón seguido que Pedro Zurita es de centro izquierda. Habrá que saber al final cual es la definición de cada uno de ellos y sin ambigüedades, porque tener una opción política no es una ofensa o… ¿sí?
