¿POR SUS ‘OBRAS’ LOS CONCERÉIS?

¿POR SUS ‘OBRAS’ LOS CONCERÉIS?

Yo no vivo en Lima (capital), por lo tanto es poco lo que podría decir de la gestión municipal del Dr. Luis Castañeda Lossio. Más si por estos días uno viaja a Lima y encuentra que el tránsito en la ciudad es un caos, es muy por seguro que muchos limeños hablarán mal de su gestión. Ahora no sé si lo mismo pensará de aquí a unos meses que se terminen las obras que está realizando. César Hildebrandt le dice ‘picapedrero’ por las obras que realiza olvidándose de las necesidades más elementales de la mayoría de la población limeña. Pero de lo que si puedo opinar es de algunas de las obras que ya realizó.

En estos días -27,28 y 29 de julio- he estado en Lima y he visitado dos hermosos lugares que no existían antes de su paso por la municipalidad de Lima.
Una de ellas es el ‘Circuito de Fuentes de Agua’ que se encuentran ubicadas en lo que antes fue el ‘Parque de la Reserva’ (1 930). Una hermosura que acaba, el 26 de Julio, cumplir un año de inaugurada. Está compuesta por 13 fuentes: 1.Fuente Mágica, que tiene como característica que el chorro principal alcanza una altura de 80 metros; 2.Fuente de la Fantasía, cuya atracción es el baile que ofrecen los chorros al compás de la música; 3.Fuente de la Ilusión; 4.Fuente Cúpula Visitable; 5.Fuente Tangüis; 6.Fuente de la Armonía; 7.Fuente Arco iris, que es la primera fuente que nos recibe al entrar al ‘Parque de la Reserva’ por la Av. Arequipa; 8.Fuente Túnel de las Sorpresas, en la que se puede pasar por debajo de los chorros; 9.Fuente Laberinto del Ensueño, fuente que no sólo se ve, si no también interactúa con la gente; 10.Fuente de la Vida; 11.Fuente de las Tradiciones; 12.Fuente Río De Los Deseos y 13.Fuente De Los Niños, fuente que, también no sólo se ve, sino que interactúa, especialmente con los niños.

La otra, es el ‘Parque de la Muralla’, en el distrito del Rímac, a las orillas del margen izquierdo del río (del mismo nombre). Ha sido construida en la que fue la antigua muralla de los alrededores de la ciudad para protegerla de los piratas y ataques de los enemigos de la corona española en el siglo XVII. La presencia de 300 metros lineales de ésta y un museo de sitio que exhibe las piezas arqueológicas halladas en la zona, le dan un carácter cultural e histórico al centro de esparcimiento.

Estas dos obras, así de pasada, nos puede decir de la iniciativa y creatividad que deben tener las autoridades para dirigir a su comunidad y darle (entre otras cosas) el esparcimiento sano que necesita y salir de lo estresante que se está volviendo la ciudad a precios módicos (se autofinancian) y no envidiarle nada de nada a otras ciudades de otros países del mundo.

Apreciar estas dos obras nos puede dar un indicador de por qué Castañeda tiene la aceptación de votos que tiene en Lima. No significa que estemos de acuerdo con las prioridades que se les deben dar a las obras, porque las necesidades de las grandes mayorías de limeños son otras. Eso no significa que el pueblo no necesite de un sano esparcimiento o que sólo se dedique al embellecimiento de la ciudad.
Queda claro que a Castañeda el pueblo de Lima lo ha de recordar por muchos años por las obras de sano esparcimiento y las de pavimentación. ¿Y a nuestras autoridades por qué ‘obras’ de trascendencia los hemos de recordar?